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| Imagen elaboración propia |
Esta pregunta se realizaba una periodista en un programa de tv analizando los sucesos acaecidos en Puerto Montt, en los que un adolecente arremete con un arma contra su compañero, aparentemente, debido a que no pudo soportar la frustración de recibir una mala calificación.
Desde mi perspectiva, los padres y madres estamos haciendo un pésimo trabajo, hemos dejado nuestros hijos abandonados en un sistema que supuestamente los protege y con eso nos lavamos las manos respecto de nuestra propia responsabilidad en la crianza.
Históricamente hemos olvidado a nuestros niños, con frases cómo “que sabes tú”, “son cosas de grandes”, literalmente nos expulsaron de los espacios de debate y conculcado nuestro derecho a ser escuchados. Hoy hacemos lo mismo pero solapados en el celular; ponemos a cantar a la chancha rosada e hipnotizamos a nuestros pequeños con colores llamativos y voces chillonas e incluso por necesidad u opción los abandonamos en los jardines infantiles o salas cuna, en edad donde su desarrollo psicológico aún no está preparado para sociabilizar con pares, sino más bien es el periodo más importante donde se debería desarrollar una vinculación segura con los padres, constituyéndose así las bases para formar relaciones interpersonales sanas en el futuro.
Tampoco se trata de entregar solo tiempo, sino de contenido, es decir, cómo hago que la calidad de ese tiempo sea la apropiada para las necesidades de los niños, la familia y la sociedad. El resultado no será positivo si nos pasáramos todo el día, transmitiendo frustraciones, miedos y traumas, ya tendrán suficiente en el futuro con las propias cuando crezcan y deban enfrentar un entorno, cada vez más hostil.
Hoy observamos adolescentes desadaptados corriendo enmascarados, levantando consignas que parecen un llamado de auxilio a sus padres. No obtuvieron el cariño y contención que necesitaron, y en su lugar les entregaron tecnología de última generación y los matricularon en un colegio “emblemático” o de apellido “college”.
Hace 3 décadas Chile era un país mas pobre, pero mucho mas humano.
Constanza Morales
Franco Contreras
29/05/2019
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