Invasión hedonista

Imagen, elaboración propia

Diariamente observamos a nuestro alrededor un desenfreno hedonista orientado a satisfacer al individuo sin consideraciones respecto de la sociedad en general. Este es el caso de comunidades campesinas, que no solo deben enfrentar el crecimiento desregulado de la ciudad y la falta de una planificación sustentable, la usurpación de territorio, cambio climático, sino que además debe lidiar con personas sin empatía que en masa llegan a su territorio.

 

Lamentablemente somos testigos de “jeeps” que arrasan con cercos y atropellan dando muerte a las mascotas de nuestros vecinos o motoqueros que con arrogancia nos desafían y aceleran para pasar por nuestras tierras como si se tratara del París-Dakar y cazadores empinados en sus pick-up que con potentes focos iluminan nuestras propiedades e interrumpen nuestro sueño.

 

Los autos se estacionan en la cancha de nuestro club deportivo, hacen fiesta hasta altas horas de la madrugada, convirtieron en un micro basural  la “vuelta del águila”, quieren jugar con sus 4x4 en sectores que configuran el origen de nuestro sistema de agua potable rural (APR), dejando sus papeles defecados ahí o en la Laguna el Copin, que es Santuario de la Naturaleza. 

 

Hoy el supuesto “turismo” que se genera en nuestra comunidad es como si alguien arrendara nuestra casa mientras nosotros vivimos en ella y se llevaran la plata mientras somos encerrados en una bodega oscura.

 

Nuestros niños del campo no sólo ven vulnerados sus derechos cuando aceleran al máximo los motores en nuestras angostas calles, encienden fuegos artificiales, fogatas, arrojan su basura en los cerros y asesinan sus mascotas, esta vez, durante el fin de semana pasado ingresaron a la Escuela Fernando de la Fuente, violentando el cierre perimetral del último colegio de Campos de Ahumada, para que estos visitantes jugaran con lo que ahí había. Cuando fueron increpados por los vecinos, utilizaron la mentira y una patética fanfarronería. Aparentemente algunos piensan que los niños de Campos de Ahumada no tienen los mismos derechos que los niños y niñas de Los Andes o San Esteban. ¿Se atreverían los padres andinos a romper el cierre perimetral de un colegio en cuarentena por Covid-19?  

 

Campos de Ahumada es una comunidad que agrupa a cientos de campesinos (as) que nos muestra una de las formas de organización más antiguas de nuestra sociedad, ya que tienen su origen en la entrega de mercedes a los conquistadores, que no correspondían a las grandes haciendas coloniales sino que a terrenos de secano mas pobres, para una economía de subsistencia, tiene escritura publica, plano que determina su territorio, inscripción en el conservador de bienes raíces y decreto de bienes nacionales, pero aparentemente la ignorancia y discriminación no conocen frontera y en la ciudad se ha anclado una concepción de nuestra sociedad en que el campesino y sus hijos e hijas aparentemente son ciudadanos de segunda clase. 

 

 

Franco Contreras 

01/07/2021